Realismo Sucio



Realismo Sucio
Microrrelatos Homenaje Charles Bukowski
150 microrrelatos
VV. AA.
ArtGerust
Madrid, España
2013

PRÓLOGO

Charles Bukowski es uno de mis autores preferidos desde la adolescencia. A menudo, sus detractores le acusan de ser precisamente eso, un escritor de adolescentes o para los poco leídos. Está claro, ante estas afirmaciones, que el mundo de la cultura y, concretamente, el de la literatura no está exento de bastante snob y bastante tontería.
Bukowski te podrá gustar más o menos, mucho o poco, pero, sin duda, es uno de los grandes escritores norteamericanos del siglo pasado. Un salvaje, un borracho, un loco, un iluminado, lo que quieran, pero, por encima de todo, un grandísimo escritor, un enorme poeta. Como les comentaba al principio, se trata de uno de mis autores de cabecera y leí todo lo que caía en mis manos del viejo Bukowski y las andanzas de su alter ego Henry Chinaski. Novelas, relatos, poesía, todo lo disponible, me fascinada.
Con el tiempo fui descubriendo otros autores y dejé aparcado a mi escritor favorito. Durante al menos doce años no leí nada de él, era un recuerdo, un nombre que me dibujada una sonrisa en la cara cuando escuchaba alguna referencia de su escritura o de sus legendarias andanzas. Pero no hace mucho, pocos meses antes de que la Editorial ArtGerust convocara el certamen en su homenaje, me dio por volver a leerlo todo. Factotum, Cartero, Se busca una mujer, La máquina de follar, Peleando a la contra… Todo, absolutamente todo.
Ante mi sorpresa, no solo no me resultó un escritor para adolescentes, es que me gustó más que antes. Quizá porque cuando lo leía con veinte años quería ser un maldito y veía en él esa inspiración de beber y estar con todas las mujeres que pudiera, de despedirme de trabajos insultando a mis jefes y que me pasaran historias reservadas para los genios. Ahora procuro mantener mi trabajo, tengo una familia y bebo pintas de cerveza con moderación (casi siempre).
Así que me senté a leerlo de nuevo con la diferencia de que ya no quería ser como él. Ahora soy el treintañero que Chinaski y yo mismo, de joven, hubiéramos pensado que era un capullo, pero eso da igual, lo importante es que me encontré con un escritor directo, tierno, salvaje, divertidísimo y lleno de vida. Uno de esos tipos que te dicen las cosas más sensibles del mundo y siguen pareciendo rudos, sin cursilerías, sin adornos, sin frases hechas, un escritor herido, valiente y sincero. Y, encima de todo eso, me reí mucho. Es un grande Bukowski.
En este certamen hemos visto muchos homenajes, relatos que evocan la desesperación de los empleos alienantes sin futuro, las grandes borracheras, las putas, las peleas. Relatos, también, con divertidas y surrealistas conversaciones, con guiños evidentes al maestro y, sobre todo, he visto a cientos de escritores compartir las misma pasión que tengo yo, la pasión por el mito Bukowski.
Aquí tenéis 150 de esos pequeños grandes homenajes, un libro que tendré siempre conmigo, junto a Hollywood, Erecciones, eyaculaciones, exhibiciones, Mujeres, Música de cañerías o cualquiera de sus inmortales obras, para no olvidar nunca todas las veces que quise ser como Charles Bukowski.

Israel I.V.   Colaborador de ArtGerust

No hay comentarios: